Ajenjo, absynth, wormwood, absenta.

Me diluyo lentamente al respirarte con la mirada
Las venas mas pequeñas y las arterias mas anchas se empapan de ese liquido verde que sube y baja a ciclos por todo mi cuerpo, estoy tan saturado en ti que he comenzado a destilarte por las palabras.
Y estas ahí, inmóvil
el azúcar se carameliza al fondo,
las llamas se han extinguido ya.
Me siento tan embotado de tu presencia,
de tanto en tanto hay un dilatamiento en mi cabeza
que amenaza terrorificamente con tirar los vasos de la mesa,
con romper los sostenes de mi realidad contigo.
Nadie es feliz en el intoxicamiento pertinaz y mortal.
Nadie es
ni feliz, ni triste.
No soy.
Por eso estoy tan contradictoriamente feliz.
Amargamente dulce.