Extásis
A tanto darle vueltas a mi cabeza me doy cuenta que no puedo decir mas que no se nada. No hay coherencia entre este devenir y lo que es la lógica de mis días sin ti. Vamos, que si al día de hoy no puedo sacudirme ese nerviosismo de en medio del pecho, menos aun podría decidir dejar de pensar en otra cosa ajena a tu nombre.
Aclaremos, mi vida es caótica, dolorosa e incierta (tal cual debe de ser si nos apegamos al dicho de “cosechas lo que siembras”), ahora que si esto lo tomas como un reproche… estas en lo correcto.
El lió en esto no es mas que uno solo…
Cuando me besaste, (favor de leer el anexo en el post scriptum) todo estaba bien, no había dudas ni temores; mi muy particular infierno gano terreno cuando dejaste de hacerlo. No hay nada que dure más de lo que puedes desear.
PS: Cuando me besaste…
inesperada, tierna, triste, lenta, apasionadamente, se reunieron en la distancia de tu labios a mi boca el paso de cada tarde-de-cada día de cada-semana-de-cada-mes-de-cada-año que imagine el sabor de esa esquiva oportunidad que es un beso dado por el ángel perfecto que eres. Baruch Spinoza hablaba en su Ética, de las cualidades y atributos de la esencia de Dios, decía que en todo aquello que es bueno y hermoso se encuentra la tangible muestra de la existencia de un dios. Si es verdad la mitad de lo que dice, aunque me cueste creerlo, al verte a los ojos se que Dios existe. Por cierto el infierno solo es la ausencia de la Divinidad (ergo mi vida es un infierno).
Aclaremos, mi vida es caótica, dolorosa e incierta (tal cual debe de ser si nos apegamos al dicho de “cosechas lo que siembras”), ahora que si esto lo tomas como un reproche… estas en lo correcto.
El lió en esto no es mas que uno solo…
Cuando me besaste, (favor de leer el anexo en el post scriptum) todo estaba bien, no había dudas ni temores; mi muy particular infierno gano terreno cuando dejaste de hacerlo. No hay nada que dure más de lo que puedes desear.
PS: Cuando me besaste…
inesperada, tierna, triste, lenta, apasionadamente, se reunieron en la distancia de tu labios a mi boca el paso de cada tarde-de-cada día de cada-semana-de-cada-mes-de-cada-año que imagine el sabor de esa esquiva oportunidad que es un beso dado por el ángel perfecto que eres. Baruch Spinoza hablaba en su Ética, de las cualidades y atributos de la esencia de Dios, decía que en todo aquello que es bueno y hermoso se encuentra la tangible muestra de la existencia de un dios. Si es verdad la mitad de lo que dice, aunque me cueste creerlo, al verte a los ojos se que Dios existe. Por cierto el infierno solo es la ausencia de la Divinidad (ergo mi vida es un infierno).